• nyylor@gmail.com
  • Paradero Desconocido

CAPÍTULO 18. El olor a oso

A primera hora de la mañana siguiente, Caitlyn se personó en el despacho gubernamental que había al oeste del nuevo edificio de reuniones. El hombre que la atendió tenía grandes influencias con familias acaudaladas de la zona y tenía en alta estima a la sheriff por sus grandes logros en una carrera recién nacida, más teniendo en cuenta la corta edad de la muchacha. Era con diferencia uno de sus mayores tesoros, porque Caitlyn además resolvía casos que habían estado mucho tiempo cerrados. La cara de dicho dirigente se volvió pálida cuando la muchcha se desenganchó la placa de sheriff […]

CAPÍTULO 17. Los ojos rosas de la destrucción

—He hecho cosas de las que me arrepiento enormemente. Empezó la mujer, de piel morena, acuclillada frente a una mesa. Tenía las manos cruzadas y casi parecía rezar una plegaria, pero en realidad, aquella postura siempre le había ayudado a meditar. Su cerebro pasó rápidamente recuerdo tras recuerdo todo lo vivido los últimos meses. Había sido lento, pero al mismo tiempo muy intenso. Todo por una causa demasiado grande hasta para ella misma. —Y haré cosas de las que me arrepentiré siempre. Pero son necesarias —se excusaba, moviendo lentamente la yema de sus gruesos dedos sobre la mesa. Sevika frunció […]

CAPÍTULO 16. Un segundo error

Al cabo de una hora, Sevika había vuelto a la parcela de la vivienda de las chicas, acompañada por un pequeño séquito de corceles. Los animales tenían un talante envidiable, una salud mejor que la de cualquier paisano de Zaun, y por los grabados en las herraduras, pertenecían al condado de Piltover donde Caitlyn ejercía su mandato. Aquel detalle de las herraduras no fue pasado por alto por Sevika, hacía falta dinero para gastar en semejante idiotez. Lo comentó a Gabriel y le acrecentó la rabia que ya de por sí le tenía a la chiquilla de mirada celestial. Pero […]

CAPÍTULO 15. Desconfianza

Apartamento de Vi y Caitlyn (Zaun) Gabriel no tardó mucho en hacerse notar en la casa de Caitlyn y de Vi. Se acercó una mañana por petición de Sevika con otro plan aún más horrible y frío que el del carro roto. Esta vez no habría daño físico. Pero era mucho más importante que no hubiera fisuras, porque de ello dependía el cambio de visión que Vi tendría respecto a los bandos que distanciaban a Piltover de Zaun. Necesitaban a Vi en su equipo, no en contra. Lo lograrían a como diese lugar. Según acortaba distancias con el extenso jardín, […]

CAPÍTULO 14. Un sangriento toque de atención

Centro de Zaun Una interminable fila de personas se aglomeraba frente a los carros de Piltover, enormes y lujosos. En sus cajuelas había varios vigilantes repartiendo lo que correspondía a cada familia que había hecho hacía unos meses la llamada de socorro. La mayoría eran familias compuestas de cinco o más miembros, y todos se iban con sus carros maltrechos a rebosar de comida, dinero, y un escolta que les acompañaba hasta el banco para no ser robados por el camino. Con eso les daría para subsistir pocas semanas, pero era de agradecer hasta que la nueva ley pacificadora viera […]

CAPÍTULO 13. Primer contacto con los secuaces

Tres semanas más tarde El tren que atravesaba Piltover llegó finalmente a las barriadas más periféricas de Zaun. No importaba cuántas tiendas tuviera el centro, Zaun no había recibido las ayudas prometidas del ala superior a tiempo y la vegetación, en gran medida, volvía a pudrirse por los efectos de los gases contaminantes. El asunto había llegado nuevamente a manos del Consejo. Caitlyn y Vi decidieron actuar juntas después de unas merecidas vacaciones de la sheriff, que había aprovechado para cuidar de su padre en la medida de lo posible tras su despertar. El secuaz de Sevika se encendió un […]

CAPÍTULO 12. El caballo de Troya

Mansión Kiramman Los dos guardias que custodiaban la verja exterior vieron claramente una figura encapuchada acercándose a la casa y dieron la señal de alarma. Dentro, Caitlyn saltó de la cama y se calzó unas zapatillas de andar por casa, envolviéndose en el albornoz largo mientras echaba un vistazo a través del ventanal. El aumentador de sonidos reverberó cerca suya y contestó. Oyó una voz precipitada al otro lado. —Señorita Kiramman, ¿logra identificar a la chica? Quiere entrar al patio, dice que se conocen. —La conozco, pregúntele qué quiere. Su voz viajó por el canal, y la propia Vi fue […]

CAPÍTULO 11. Un nuevo abandono

Cuando las hermanas despertaron, Caitlyn ya no estaba. Había dejado todo limpio y recogido, su cama hecha. Vi supo que había utilizado la ducha bien temprano a juzgar por lo poco húmeda que estaba una de las toallas. —Falta una de mis armas —dijo Jinx, al poco de empezar a desayunar. Aún seguía masticando su pedazo de tortilla. Vi se giró de la sartén para mirarla. —¿Estás segura? —Pues claro que estoy segura, qué pregunta es esa —frunció el ceño la peliazul, limpiándose los restos de comida con la misma muñeca, miró mal a Vi. —¿No ha pasado ni doce […]

CAPÍTULO 10. Fallando a unos ideales

Prisión de Stillwater —¿Cómo estás? —Bien, ¿no me ves? Aún encerrada, como deseabas. La aspereza de Jinx contra su hermana era de esperar. Era la tercera vez que lograba concertar una cita, aunque el tiempo que les concedían era escaso y Jinx debía permanecer entre barrotes. No tenía la ventaja de otros reclusos porque la consideraban demasiado peligrosa. En su lugar, Vi estaba obligada a conversar delante de un guardia y tenía que ser cacheada antes y después de permitírsele el paso. Era Caitlyn quien la cacheaba y la que las observaba en ese momento, para suplicio de Jinx. —Nos […]

CAPÍTULO 9. La calma antes de la tormenta

Casa de Caitlyn, terreno fronterizo Caitlyn había conducido el coche a una enorme velocidad para llegar rápido tras terminar de trabajar. Sabía que tarde o temprano aquella sería la parada de Vi, si resultaba ir en serio con la ruptura. Estaba agotada, la jornada laboral había sido muy larga y tediosa, y había tenido que cabalgar a caballo, una actividad que llevaba un año sin practicar y le había dado agujetas alrededor de la entrepierna. Hacía una hora había sido la discusión con Vi en La última gota y no pensaba quedarse de brazos cruzados viendo cómo mandaba todo al […]